Desde su surgimiento y hasta la fecha, ya con más de medio siglo de nacida, la tecnología del láser se ha aplicado a los más diversos artefactos, muchos de ellos muy conocidos y populares, por ser de amplio uso doméstico.
Algunas de las tecnologías más populares que hacen un uso benigno y provechoso del láser, son:
- Los reproductores y quemadores de CD, DVD, y Blue-ray
- Las impresoras láser
- Los escáneres
- Los lectores de códigos de barras
- Los dispositivos apuntadores o punteros láser
- Algunos tipos de ratones (mouse) ópticos
- El llamado bisturí láser, usado en cirugías de alta precisión e intensa perforación
- La depilación corporal
- Odontología
- Transmisión fidedigna de datos luminosos a través de fibra óptica. Una de las aplicaciones más conocidas de esta combinación de láser y fibra óptica, es la Internet
- Experimentos científicos de precisión, como la medición exacta de grandes distancias, la detección de movimientos telúricos y de contaminación ambiental, la construcción de aceleradores de partículas, y los estudios de espectroscopia.
- Los robots de la industria automotriz, que han hecho posible la fabricación de piezas que antes eran inimaginables, y por tanto han revolucionado dicha industria en cuanto a diseño y funcionalidad.
- Un uso curioso del láser es la llamada “arpa láser”: un arpa que sustituye sus cuerdas tradicionales de metal o nylon, por cuerdas de luz láser, creando un espectáculo tan sonoro como luminoso.
- Proyección de hologramas
A todos estos usos benéficos, hay que sumar los equipos de corte y grabado con láser —como el que usamos en HEY LÁSER—, que posibilitan cortar, perforar, marcar, calar, tornear, grabar, imprimir, dibujar, una gama casi infinita de materiales, con una rapidez, una precisión y un acabado que nunca habían sido logrados antes del surgimiento del láser.